La Unión en Carpa Astros.
CDMX 12 de diciembre 2016| Fotografías por Ana Rodelo| Reseña por Leslye Arredondo
La Unión
Un abanico de emociones se vivió el pasado jueves en la Carpa Astros. Personas de todas las edades se dieron cita para darle una escarbada a los recuerdos de juventud o hacer nuevas memorias con los temas clásicos —ahora renovados y muy bien arreglados— de la agrupación española, La Unión.
En el foro exterior, Los Impresentables con su bailable estilo, soltaron lo suyo en el escenario, atrayendo la atención de los que iban entrando. Después, Señora Kong, con 11 músicos que ejecutaban desde congas hasta ukulele, sorprendió por su energía, que logró prender al público hacia la mitad de su presentación. Ana Kong, demostró su enrome talento y grandes dotes de frontwoman; hace de todo. Baila, canta maravillosamente, tiene feeling y actitud rockera, conecta con el público con su excentricidad y carisma. Cambios de vestuario y un excelente setlist, nos dejó listísimos y con los ánimos abiertos para disfrutar al plato fuerte de la noche.
Adentro de la Carpa, una gran pantalla con animación cósmica, la plataforma limpia con un sintetizador al fondo, tres bases de micrófono al frente y nada más. Luego de un pequeño viaje al pasado con éxitos ochenteros que incrementaban las ganas, se hizo presente Rafa —vocalista— arrancando los gritos de las fans; lucía contento e impecable. Inmediatamente, Luis —bajista—, hizo su arribo al lado izquierdo del escenario, bien plantado e inspirado, se colocó en posición para arrancar el concierto. Dos músicos súper preparados se encargaron de los arreglos de guitarra, teclados y mezclas programadas por el sintetizador que le inyectaron a los temas una frescura con aires techno, disco y electro que elevaron al público, incitando al baile y la entrega.
Gritos, aplausos, piropos y euforia sonaban de fondo; La Noche esperada llegó, entre luces neón se iluminaban las Mil Siluetas danzantes que brincaban en la pista. Con Tanto Amor se conectó la audiencia por completo, que seguramente esperaron ansiosos para subirse al Tren de Largo Recorrido con los españoles. Las voces se rasgaron en Vivir al Este del Edén, Carnaval inundó de nostalgia la atmosfera, la interpretación de Rafa de Negrita erizó la piel de todas las chicas, sorprendieron con Manos Vacías acompañados de Los Hijos de Frida y para la llegada de Lobo Hombre en París, la fiesta explotó de una forma atómica. El set se cerró con Fluye, be water my friend con un sabor a retorno. Sildavia fue la estrella del encore, que realmente conmovió a los fans, un tema súper esperado y que en esta ocasión, fue ejecutado con un sonido muy bailable.
Rafa demostró su experiencia escénica, los comentarios que hacía al final de las canciones para ligarlas a la siguiente, tenían una carga filosófica respecto al disfrute de los instantes bellos que ofrece la vida, el aprendizaje humano y un mensaje positivo respecto a la situación que nuestro país enfrenta. Sin errores de interpretación, ni fallas técnicas, con animación multimedia acertada, iluminación y ecualización inmejorables, el vínculo entre el bajo y Luis desgarrando sus cuerdas y sólido estilo vocal de Rafa se conjugaron para brindar más de una hora y media de show, que en definitiva, dejó a todos felices, satisfechos y listos para seguir la fiesta. La Unión demostró que son un clásico renovado, que tiene mucho que ofrecer al público y con las alianzas que han hecho con músicos mexicanos de diversos géneros, seguramente tendremos más de ellos por estas tierras muy pronto.
